Los sábados vendía chicle en el teatro de Coamo, un pequeño pueblo ubicado en la cordillera central de Borinquen, donde Roberto Valentín Fred dio sus primeros pasos en la música popular. Nacido en 1941, creció escuchando a los boleros de Trío Vegabajeño, Los Tres Ases y Los Diamantes. Desarrolló su talento musical tocando instrumentos de cuerda como guitarra, bajo y cuatro, actuando con varios conjuntos de trío en Coamo. Estudió saxo alto en la Escuela Libre de Música José Ignacio Quintón, pero cambió a trompeta porque creía que este instrumento le permitía expresarse mejor. Profesionalmente, Bobby Valentín escribió los primeros capítulos de su saga artística en Nueva York.
Llegó a los 16 años y brilló como trompetista y arreglista con las orquestas de Joe Quijano, Charlie Palmieri, Willie Rosario, Louie Ramírez y Tito Rodríguez, a quien recuerda con orgullo por darle la oportunidad de actuar en el disco En Puerto de 1963. Azul, Venezuela. En 1965, Bobby fundó su propia orquesta, allanando el camino para su debut El Mensajero, lanzado en 1966 por Fonseca Records. Ese mismo año, se convirtió en el primer artista en ser firmado por Johnny Pacheco y Jerry Masucci para el recién formado sello Fania. SUS CANTANTES Su primer cantor fue Marcelino Junior Morales, quien participó en el primer disco de Valentín y cuyo estilo (similar al de Tito Rodríguez) fue muy popular. El segundo cantor fue Frankie Hernández, a quien Valentín conoció en 1966 compartiendo cartel con la Orquesta Internacional en el salón El Coameño. Cuando regresó a Puerto Rico en 1968, habiendo decidido quedarse allí para siempre, invitó a Frankie a participar en Se La Comió, estrenada en 1969. Aún así, el intérprete más identificado con la orquesta de Valentín es el difunto Grifo De Nemesio. Canales, más conocido como Marvin Santiago, El Sonero del Pueblo. Cambió el estilo de nuestra orquesta. Mucha gente pensó que era Marcelino, por sus similitudes vocales.
Siguiendo el clásico disco de Rompecabezas, se convirtió en un fenómeno, me dijo Valentín al mencionar a Marvin, que había grabado previamente con Roberto Angleró y Rafael Cortijo. Frankie Hernández fue el cantante de Valentín en dos ocasiones distintas. Tras el disco de 1975 grabado en la cárcel Penitenciaría Estatal, Frankie se incorporó a Impacto Crea, siendo sustituido por Johnny Vázquez, un exquisito vocalista que había demostrado su conocimiento del género con la Orquesta Dicupé y Andy Harlow. Aunque otros cantantes como Luigi Texidor, Cano Estremera, Rafú Warner, Luisito Carrión y Giovanni Lugo actuaron con la banda de Valentín, el aporte de Marcelino, Frankie y Marvin es único porque se dio antes, durante y después de la explosión de la salsa. EL PODER DE SU ORQUESTA El secreto detrás de los robustos paisajes sonoros de la orquesta de Valentín reside en la combinación de saxofones tenor y barítono, trompetas y trombón. Sus arreglos delatan la influencia de René Hernández, Ray Santos y Tito Puente. Es importante destacar el aporte de músicos como Aldo Torres, Humberto Ramírez Sr., Juancito Torres, James Adames y William Thompson, entre muchos otros que definieron la identidad estilística de la banda. Bobby, arreglista de grandes éxitos de cantantes como Cheo Feliciano, Ismael Quintana y Justo Betancourt, también fue parte importante de la Fania All-Stars.
Desde la legendaria reunión de 1971 en el Cheetah, se le conoce como El Rey del Bajo, (Rey del Bajo), un instrumento que comenzó a tocar en sus propias grabaciones solo después de establecerse en Puerto Rico. “EL REY DEL BAJO” Y SU PATRIMONIO Esta colección recoge los momentos más importantes de los nueve discos que Bobby Valentín grabó para el sello Fania: Young Man With A Horn, Bad Breath, Arrebatarnos, Se La Comió, Algo Nuevo, Rompecabezas, Soy Boricua, Rey del Bajo e In Motion. Una gran oportunidad para apreciar el talento superlativo de Valentín como arreglista, compositor, director musical, jazzman, cantante e intérprete solista de trompeta y bajo eléctrico. Se incluyen aquí también las mejores canciones que Roberto Angleró y Tite Curet Alonso escribieron para su orquesta. Un mosaico de imágenes patrióticas, sociales, románticas y culturales que quedaron inmortalizadas en narrativas salseras como “Soy Boricua”, “Papel De Payaso”, “Pan De Negro” y “Aquí No Me Quedo”. Es hora de bailar y disfrutar de la herencia de Bobby Valentín.
Producido y compilado por Jaime Torres Torres