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ADELANTE, GIGANTE

Entrevista tras entrevista, el mago del teclado Eddie Palmieri ha declarado repetidamente que su hermano mayor, Charlie, quien falleció en 1988 a los 60 años, dominaba el piano mejor que él. En realidad, comparar a Charlie y Eddie Palmieri es un ejercicio inútil. Ambos son considerados como intérpretes y directores de orquesta extraordinariamente talentosos, cuya influencia duradera en la historia de la música latina no puede subestimarse. Dicho esto, escuchar solo una vez a Adelante, Gigante es suficiente para que los aficionados afrocaribeños comprendan de qué hablaba Eddie cuando afirmó con orgullo que Charlie era el verdadero “Rey de las Blancas y las Negras”. El Rey de las Teclas del Piano.

Entonces, ¿en qué se diferencian estos dos gigantes musicales? En lanzamientos clásicos como The Sun of Latin Music, Eddie favoreció los acordes psicodélicos y la atmósfera disonante. Mantuvo contentos a los bailarines con funkatones de salsa orgiástica, pero su sed de experimentación no se calmó fácilmente.

Charlie, por otro lado, era un solista más conservador. Su espectacular sentido del swing era elegante y comedido. Había algo aterciopelado en sus arreglos, incluso cuando su orquesta alcanza la cima de una fiera bailabilidad. El sonido de Charlie se remonta a la delicada dinámica de pianistas clásicos como el cubano Peruchín y el puertorriqueño Noro Morales.

“Cuando escuchas los solos de Charlie, te llevan de regreso a una raíz, y esa raíz es Noro Morales”, dice el sonero Adalberto Santiago, quien interpretó la voz de fondo en muchas de las sesiones de Charlie de los años 1970 para el sello Alegre. "Noro era su ídolo".

Caso en cuestión: La composición de Morales Tema de María Cervantes recibe un tratamiento de lujo en este álbum. Podría decirse que es el corte más trascendental del disco, especialmente durante la sección en la que el patrón de piano hipnótico de Charlie se complementa con el solo de timbales igualmente elegante de Quique Dávila.

Cuando se le pregunta sobre el temperamento de Charlie, Adalberto recuerda el contagioso sentido del humor del Gigante.

“Era un ser humano increíble, siempre riendo y contando chistes”, recuerda Santiago. “Tenía este dicho divertido que adopté como mío: Me siento tan bien que me siento mal que me traten tan bien, me siento tan bien que me siento mal porque me tratan tan bien”.

El exuberante sentido del humor de Charlie está presente en la elección del material. Tres de las canciones aquí cuentan con el tipo de humor afable que define la música tropical en su mejor expresión alegre.

En El Susto, el crooner puertorriqueño Vitín Avilés canta sobre dormir durante tres días seguidos después de ingerir decenas de ostras y también un poco de sopa de pescado. Lo dan por muerto y lo colocan en un ataúd “muy vestidito de negro” (muy vestido de negro). Afortunadamente, se despierta a tiempo para evitar que lo entierren vivo. La entrega caballerosa de Avilés, que recuerda a su buen amigo y compatriota Tito Rodríguez, le da un matiz aristocrático a este cuento de un fiasco inolvidable.

El juguetón Al Que Le Pique (conocido entre los fanáticos de la música más jóvenes como un pegajoso éxito de merengue) y Por Querer Tener Dos (la historia de un esposo infiel) son igualmente divertidos. Este último también incluye uno de los funky solos de piano de El Gigante.

Al crear sofisticadas yuxtaposiciones entre estados de ánimo dispares, Charlie hizo bien en incluir un bolero en esta colección. Muchos recordarán Cuando Vuelva A Tu Lado interpretada por Trío Los Panchos con Eydie Gormé. La interpretación matizada de Avilés es una joya, y el arreglo favorece el camino estético seguido por Cheo Feliciano en su seminal disco Cheo. Este es el bolero visto a través del prisma nostálgico de la década de 1970, cargado de matices de jazz, una sensibilidad lounge y un toque de pop melodramático.

Son momentos como este los que elevan a Adelante, Gigante al estatus inequívoco de una obra maestra menor.

Créditos del álbum:

Organizado y dirigido por Charlie Palmieri

Charlie Palmieri - Piano, Fender Rhodes, Organ
Rudolpho Manzano - Trompeta
Lou Laurita - Trompeta
Bobby Nelson - saxo tenor y flauta
Bobby Rodriguez - Bajo Fender
Enrique Dávila - Timbales
Willie Rodriguez - Bongo
Luis Rodriguez - Conga
Pito González - Tamboura

Coro: Pedro Lombillo, Willie Nival, Ray Velez

Arreglos - Charlie Palmieri, Tito Puente, Fernando Pizarro
Productor - Joe Cain
Ingeniero - Charlie Palmieri Jr (Grabación y remezcla)
Ilustración original Fotografía y diseño: Eduardo Bermúdez
Coordinadora de proyectos - Evelyn Garcia
Grabado - Generation Sound Studios, NY

Escrito por Ernesto Lechner